Apocalípsis
Capítulo 1
Bienvenidos a mi cabeza, mi nombre es Pompita, y soy un American Pitbull
Terrier.
Exactamente, éste:
¡A que soy guapo!
Mi dueño se llama Matthew, y lo protejo como si fuera mi cachorro desde
que llegó a este mundo.
Él, pronto cumplirá sus 8 añitos. ¡Qué rápido crecen!
También me puso mi nombre. Yo creo que se fijó en mis colores: Marrón
clarito y blanco.
A pesar de su edad, le encanta tocar el violín, aunque tiene que practicar
mucho.
Vivimos todos juntos en una casa gigante. Y si he escuchado bien, vivimos
en California.
No me suelo portar mal, pero, a veces soy un poco travieso.
Capítulo 2
¡Es sábado!
Los sábados son los mejores días de todos. Ya que Matthew no sale de casa
a ese sitio llamado “escuela”.
- Matthew, mamá y papá vamos a ir a la bibl. ¿entendido?- Dijo mamá.
- Sí mamá.
Mamá y papá ya se han ido, así que iré a dormir un poco.
-¡¡Boom!! ¡¡Boom!! ¡¡Boom!!- Esos sonidos hicieron que todo retumbara.
Me he levantado, y corriendo he ido hasta el cuarto de Matthew.
¡Matthew, voy a salvarte!
- ¡Pompita!-Gritó llorando Matthew.
He llegado al cuarto del niño, y lo he ayudado a llegar hasta la
puerta principal.
Al salir, hemos visto que en el cielo se encontraban unos doce ovnis
aproximadamente volando, mientras disparaban unas luces rojas brillantes
que al caer, sonaban como bombas.
Aunque estamos asustados, hemos salido corriendo hacia la casa de un
amigo de Matthew llamado Marshell, que tiene un búnker en su jardín en el
que jugábamos a tirar de una cuerda. Eran los niños contra el perro. Yo
siempre ganaba.
Estamos a punto de llegar, solo un poco más.
- Oye pequeño, ¿qué haces tú solo en pleno apocalipsis?
¡NO! ¡El FBI!
¡Estamos en la c/ Pepinillos y ahí vive Marshell!
- Verá señor, vamos a buscar a mi amigo para meternos en su búnker.
- Bueno, pues os rescataremos a todos.
- ¡Sii!
Al final nos están llevando a un búnker gigante dónde está supuestamente
todo el mundo. ¡Puede que encontremos a mamá y a papá!
Fin
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